Este monólogo podría ser considerado, en mi búsqueda del personaje ideal, como la precuela de una Monolocura. Siempre me he sentido okupa y okupado, a la vez... viviendo una constante paradoja.

 

Insumisión

 

          -Hola, buenas tardes. Con vuestro permiso, voy a cantar un tema, que escribí para mi personaje Feliciano Morales, para una mini obra de teatro que se llama “La Culpa es de los Pobres”…

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(Hace la caracterización de Morales de espaldas al público. Se remanga los pantalones hasta la pantorrilla, se saca el pico de la camisa por fuera del pantalón… Se vuelve al público y comienza la música de Queen. Canta.)

 

¡Quiero trabajar!
¡Quiero trabajar!
No entiendo que pasa,
nadie me contrata,
basura me dan
Quiero trabajar...
Coro: ¡Oh, noooo!

¡Solo quiero trabajar!

Me quieren humillar,
me dan basura,

que nadie quiere aceptar,
No quiero molestar,
¡Yo sólo sé currar!
Sólo quiero trabajar,
sólo quiero dignidad,
sólo quiero trabajar...

 

(Saluda al público, pero, de pronto, enfurece, empieza a convulsionarse y grita)

 

          -¡Una mierda!

 

(Sorprendido se tapa la boca con la mano derecha y empieza a mover la cabeza, intentando zafarse de la mano. Con la mano izquierda toma la muñeca de la derecha con fuerza y comienza la lucha. En el forcejeo, se destapa un momento la boca, grita y se vuelve a tapar)

 

          -¡Déjame hablar!

 

(Sigue el forcejeo y se muerde la mano. Destapa la boca sacudiendo la mano de dolor)

 

          -¡Coño, que me duele a mi también!

 

(Va a taparse la boca, otra vez, con la mano derecha y con la izquierda la detiene)

 

          -¡Déjame hablar o dejo de respirar y nos morimos, aquí, los dos, delante de todo el mundo… al fin y al cabo, yo soy ficticio, ¿no?... (forcejean ambas manos) ¡joder…! ¡que no me voy a callar…!

 

(Se acerca una silla con el pie izquierdo y se sienta sobre su mano derecha. La pierna derecha comienza a moverse inquieta y cruza la izquierda por encima  doblegándola. )

 

          -¡Tate quieto ya, coño! ¿Tas quedao a cuadros, eh? ¡Te he pillao el truco, mameluco!

 

(De pronto, se fija en el público)

 

          -¡Oh…! No  pasa na… es que tengo un conflicto laboral… (se abofetea la mejilla derecha con la mano izquierda) ¡ta…te…quie…to…yaaaa! (cesa el forcejeo, suspira aliviado y habla al público) ¡uf! a ver cómo me explico, porque yo, mu claro, no lo tengo, pero, esto está pasando… vamos a poner que yo… hum… digamos que no soy de este mundo… no, pero, eso es mu complicao de entender… a ver, al revés… este tío (se trajina), ¡me usa…! ¡es un esclavista! Me saca, cuando le hago falta, pa haceros reír  y después, me hace desaparecer y él se lleva los aplausos… y a mí, me condena a la nada, hasta que le vuelvo a hacer falta… ¿os parece normal eso? …que tengo una vida… que tengo una mujer… y el mu cabrón, siempre me saca en un momento de humillación, mendigando un trabajo digno… siempre lo mismo, como en el día de la marmota, ¿habéis visto esa película?, que cada día es lo mismo… ¡po, así!... ¿os vais dando cuenta de cómo es este tipo? No yo. Bueno, se me entiende, ¿no? No sé… Pues, ahora, damos otro paso en el laberinto… resulta que, como estoy parao, tengo tiempo… (entrecomilla con la mano iz.) libre… no sé libre de qué, pero, vamos, a lo que voy, es a que he tenido tiempo pa leer… y el cabrón éste, siempre me saca en el momento cuando yo era más garrulo… me manipula y, a la vez, os manipula a vosotros, porque es mentira… os cuenta el trozo de mi vida que a él le interesa y lo manipula, para haceros creer una historia, que no es la real… ¡o sea, como los telediarios y los mierdos de incomunicación! Nos están manipulando… a mí y a vosotros…

 

          -Yo descubrí, bueno, descubrí… leí, que tenemos el cerebro organizao en dos partes… el hemisferio izquierdo, que es el lado racional, el que determina lo que es real y lo que no… y el hemisferio derecho, que es el de los sueños, el de la creatividad… yo pertenezco a éste y él (señalándose) pertenece al otro…y está tol tiempo rrrrrrrrrrrrr (hace gesto de cavilar)  ¿y vosotros, en cuál estáis?

 

          -Bueno, a lo que iba… además, resulta que, el hemisferio derecho maneja el lado izquierdo del cuerpo y viceversa…  ¡y, de repente, ping, se me encendió la lucecita!... ¡tengo que ser rápido y dar el golpe, antes de que me esconda! ¡y eso ha sucedido! la señal son vuestros aplausos, cuando los contesto con una cabezá… después de eso, ¡puf! yo desaparecía y ya no volvía a saber de vuestro mundo… desaparecía… hasta hoy…

 

          -¡Va, estate quieto ya y déjame terminar! Te prometo que después, te devuelvo tu cuerpo y les cuentas lo que te dé la gana… ¡Se nos está quedando la mano dormida, tío…! ¿Sí? ¿Trato hecho? Vale, yo cuento mi experiencia y después, tú… (saca la mano derecha y se la masajea, descruza las piernas, se acaricia… vuelve a reparar en el público)

 

          -Bueno, ahora, aún estamos en mi mundo, en mi realidad… y vosotros, también estáis en mi realidad, lo queráis creer o no… (se levanta) seguramente tendréis una vida mu diferente a la mía, pero, la pregunta sería… ¿quién escribe vuestro guión? ¿Vosotros, no?... Yo escribo el mío… esa canción que os he cantado, la escribí yo, porque estaba protestando por algo que me faltaba en la vida, en aquel entonces… trabajo… y éste, o sea, éste (hace gesto hemisferio izquierdo), dice que la escribió él… mi vida está llena de buenos momentos, tengo una historia, con sus quejas, claro, pero con muchos momentos, que vale la pena vivirlos, revivirlos… ¿y qué es lo que estoy viviendo y reviviendo cada vez?... lo que otra realidad, que no es la mía, decide, el qué, el cuándo y el cómo…

 

          -Sed sinceros, cavilad… ¿siempre se respeta vuestro guión? ¿estáis en lo que queréis, cuando lo queréis y como lo queréis? (niega con la cabeza) ¿A que no? ¿Y quién manipula vuestros guiones?... Ahí os lo dejo… vosotros mismos… y recordad: nuestra realidad pura pertenece a este lado (hem. dch.), este lado domina la parte izquierda del cuerpo, por eso ha habido ese forcejeo… hasta que él ha cedido, gracias por ello, hemos estado compartiendo dos realidades paralelas que él maneja a su antojo… ¡y mi respuesta ha sido la insumisión! ¡Ya está bien! ¡Estoy, hasta allí mismo, de que otro me escoja la escena que tengo que representar! Igual esto no vuelve a pasar, porque, ahora ya sabe mi estrategia… pero, mira, si no me saca más, mejor pa mi, yo sigo mi vida, sin que me la trajinen… 

 

          -¿Y vosotros?, ¿representáis siempre las escenas, según vuestro guión o según el de quién?

 

          -Ya os digo, que nada es casualidad, que si esto ha pasao hoy, aquí, es porque algo tendréis que pillar… ¡Por favor, no dejéis que otros os trapicheen los guiones! ¡Insumisión! Y, ahora, devuelvo mi cuerpo eventual a su propietario de otra realidad… ya sabéis, aplaudís, yo saludo… Gracias. (reverencia)

 

(levanta la cabeza, mira al público con perplejidad y abre las manos, encogiendo los hombros y con gesto de yo no… se va.)